Confesiones las hay por todas partes, pero en el mundo de la peluquería y de la barbería tienen “un no sé qué que qué sé yo” que hace que los salones se llenen de los secretos y confidencias de los clientes que van a sentirse bien, ponerse guap@s y soltar todo aquello que tienen dentro. Pero ¿Y los peluqur@s y barber@s? ¿Confesarán en su tienda de confianza?
Desde la trastienda de iPelushop queremos saber más de los secretos y confesiones de los peluquer@s y barber@s del momento.
Así que este mes:
Confesiones desde la trastienda con David Fernández ·V·
¿Cómo llegaste a ser peluquero?
En esa época, todo lo que me interesaba de la peluquería era mi tupé de rocker!
Fué una casualidad la que me llevó a un salón de peluquería, precisamente al de Narcís Ibáñez, donde mi hermana trabajaba de recepcionista.
Allí contacté por primera vez con la peluquería y parece ser que me gustó porque llevo ya más de treinta años en el sector.
¿Cómo ves el sector, en qué momento nos encontramos, que recomiendas?
Diría que en lo PROFESIONAL el sector goza de buena salud en el sentido de que hay competencia, buenos profesionales, variedad de propuestas de formación, de productos, de servicios, el sector está vivo y no está monopolizado como ocurría en los ochenta, por ejemplo.
En cuanto al plano ECONÓMICO, estamos asfixiados con el peso del IVA.
Nuestra actividad es intensiva en personal, por lo que el peso del IVA en nuestra facturación no puede ser compensado por las compras que hacemos, al menos no como en otras actividades. Por ello, el margen de beneficio queda peligrosamente menguado.
¿Qué hacer? Pues, o bien trabajas con aprendices a costes bajos (arriesgado y según qué clientela tengas no lo puedes hacer); o bien tienes un ticket medio suficientemente alto para compensar el decalaje del IVA (sólo accesible para grandes nombres situados en las zonas altas de la ciudad), o bien te aguantas que es lo que hacemos la mayoría.
Con todo ello, esta inmensa mayoría hemos dejado de ser micro empresarios para pasar a ser autónomos al servicio de Hacienda.
En lo que respecta al FUTURO, como que esta profesión hay una cierta tendencia al Star System y genera algunos egos que otros; todo ello nos lleva a cierta desunión entre los profesionales del sector.
Te encuentras cooperativismo casi en todos los gremios, menos en éste.
Ni siquiera el IVA ha servido para unificarnos más que para contribuir.
Es una lástima que haya tan poca humildad en una profesión que no es fácil aunque sí apasionante.
Recomendaría a todos los que se dedican a la formación de peluqueros que incluyeran el sentido de grupo y la humildad en una actividad que es de puro servicio. Es ahí donde tenemos una oportunidad de enaltecer nuestra profesión.
Mira, tal como han conseguido los que se dedican a la cocina, ahora llamada gastronomía. ¡Un cambio así es lo que deseo para nuestro sector!.
¿Qué te motiva de esta profesión?
Para mí es una profesión muy gratificante, es completamente vocacional.
Atendemos a personas que están descontentas con su volumen de pelo, o no saben cómo peinarse, o bien desean liberarse del secador, de la plancha.. vienen a que les solucionemos un problema.
El cabello es parte fundamental de nuestra imagen y tiene una importancia capital respecto al mensaje que de nosotros mismos damos a los demás.
La peluquería es una profesión artesanal y ello muy a menudo se confunde con profesión artística.
No estoy nada de acuerdo con esta interpretación del trabajo.
Ni me considero artista ni considero que mis compañeros de profesión lo sean. Somos profesionales de peluquería, prestamos un servicio personal y no estamos tocados por un halo divino.
Un exceso de “artisteo” desvirtúa nuestra profesión, le quita valor, la disminuye. Es una lástima.
Cuéntanos alguna anécdota que te haya ocurrido
Aunque parezca mentira, no se me ocurre nada.
Naturalmente que he vivido situaciones curiosas; pero en este momento no las recuerdo.
¿Cómo ves la peluquería española?
La peluquería española está a la altura de la peluquería internacional.
Hemos sido capaces de formarnos, de estar atentos a lo que hacían los demás, hemos avanzado mucho en imagen.
En cuanto a empresas del sector, también se han producido cambios.
Antes parecía que sólo las marcas extranjeras tenían que funcionar. Ahora ya no es así.
Innovamos aquí en España. Tenemos empresas que nos ofrecen productos de máxima garantía y calidad; productos novedosos porque estas empresas invierten en i+d+i (investigación, desarrollo e innovación).
Colaboro como técnico de formación en una empresa española, y también participo como usuario en nuevas formulaciones de productos.
Nada tenemos que envidiar ni en tecnología, ni en productos innovadores, ni en resultados. Nada.
Es muy gratificante ver el sector desde el punto de vista del producto. Y, en este sentido, la evolución de los fabricantes de productos ayuda mucho a sostener nuestro sector, a reforzarlo y a no depender tanto de lo que viene de fuera, normalmente e injustificadamente más caro.
¿Cómo motivar a los empleados del salón y cómo fidelizarlos?
Para el equilibrio del salón, lo más importante es la fidelización del equipo.
Son varios los ingredientes del éxito: Formación, remuneración, seguridad, coherencia, y gestionar el equipo constantemente.
Estar cerca, ser claro, ocuparse de ellos.
¿Quién debería ser nuestr@ próxim@ confeso/a?
Os propongo a Eduard Boldova.
Un gran profesional, del que destaco su gran capacidad y humildad.
Nombre: David Fernández Va
Profesional desde: 1980
Nombre del Salón: VERSATIL
Apertura del salón: 1994
Ciudad: Barcelona.
