Libre de grasas tóxicas ¡Por fin! Con Gema Cabañero

Te presentamos un innovador programa de remodelación Detox Anti Grasa Tóxica Localizada que lucha contra el adipocito desde una perspectiva totalmente diferente. Porque la grasa no es solo cosa de ‘curvys’. Da igual, curvy o delgada, la grasa tóxica ha de ser eliminada. Gema Cabañero nos da las claves y su apuesta global para un programa completo Detos Anti Grasa Tóxica.

Ya está aquí. Una fórmula de tratamiento única: 100% selectiva (hace ‘diana’ sólo en la grasa ‘mala’) y, a la vez, de acción ‘multi-frente’ (‘ataca’ a esa grasa rebelde desde todos los ángulos, poniendo en juego los tratamientos no invasivos de mayor efectividad testada, en la rotura y ‘eliminación’ saludable de la grasa tóxica. Con un nivel de resultados increíble, medible (y visible) desde el principio sesión (¡entre 1,5 y 3 cms de reducción en una sola sesión!). Bienvenidos a la nueva era de la remodelación de la silueta.

(Por Gema Cabañero, Directora de I+D+i de 180 The Concept Nutricosmética. Directora de la Clínica Antiaging & Estética Avanzada Gema Cabañero) 

Grasas tóxicas Vs Grasas amigas

Porque no todas las grasas son el enemigo

A nivel teórico (casi) todos conocemos la diferencia entre grasas ‘buenas’ y ‘malas’ (tanto a nivel de alimentación -Ácidos Grasos/ Omegas Vs. grasas Trans- como en cuanto a aquellas con las que convivimos en nuestro propio cuerpo: grasa parda, grasa blanca, grasa visceral…). En la práctica estética, sin embargo, parece olvidarse esa diferencia: la inmensa mayoría de tratamientos de remodelación corporal (desde las liposucciones a casi todas las técnicas de remodelación no invasivas) todavía meten a todas las grasas ‘en un mismo saco’, ‘atacando’ indiscriminadamente a ‘LA GRASA’ en genérico, lo cual puede implicar riesgos para la salud y el bienestar.

 

Las grasas amigas

¿Sabías que hay más de más de 100 compuestos esenciales para el correcto funcionamiento orgánico segregados por las células grasas? Sí, el tejido adiposo se considera un órgano endocrino más: mucho más allá de su función como aislante térmico y deósito energético, también segrega hormonas como las que intervienen en la regulación del apetito y el metabolismo y participa en la síntesis de otras (como de las hormonas sexuales, por eso si hay grasa insuficiente se sufre amenorrea –retirada de la menstruación-). Además, juega un papel esencial en la modulación de la respuesta inflamatoria, emitiendo citoquinas como la IL-6, clave en la función inmunológica. De ahí la gran peligrosidad de los mensajes publicitarios que preconizan un “cuerpo libre de grasa” como “sueño” a alcanzar (como los que, por desgracia, siguen trasladando los anuncios de productos adelgazantes/quema-grasa ‘milagro’). En realidad, de poder llevarse a cabo, el “100% libre de grasa” más que un sueño, sería una auténtica pesadilla: no sólo por antiestético sino, ante todo, por fatal para la salud o, más bien, mortal. Cierto porcentaje de grasa excedente es clave para el bienestar/salud, pues la grasa actúa como mecanismo de protección: el tejido adiposo es el único órgano que tiene la capacidad de ‘expandirse’ por sí mismo creando nuevas células grasas que nuestro organismo emplea como ‘escudo’ defensivo ante 2 peligros: PREVENIR LA LIPOTOXICIDAD (que la grasa se aloje en lugares ‘incorrectos’ del cuerpo, como el interior de ciertos órganos tales como el corazón, el hígado o el pancreas) y ACTUAR COMO DEPÓSITO DE SUSTANCIAS TÓXICAS LIPOSOLUBLES (‘atrapando’ y aislando/encapsulando dioxinas, pesticidas… y el altamente liposolube Ácido Araquidónico o AA: un fosfolípido esencial que forma parte de las membranas celulares pero que, en exceso, se vuelve tóxico, convirtiéndose en el principal detonante del proceso de inflamación silenciosa.

La grasa tóxica

No es una grasa ‘distinta’ a la ‘amiga’ sino la misma que, cuando supera un porcentaje (muy variable, dependiendo de la persona) se transforma en ‘enemiga’. Ese cambio se produce cuando el AA encapsulado en las células grasas se libera, pasando al torrente sanguíneo: desde ahí provoca alteraciones en el ADN celular de las propias células grasas, que dejan de sintetizar correctamente el ATP (TriFosfato de Adenosina, un nucleótido fundamental en la obtención de energía celular), lo que desequilibra el correcto proceso de quema u oxidación de las grasas. Este desequilibrio afecta, sobre todo, al tejido graso de ciertas áreas de GRASA SUBCUTÁNEA (la que se encuentra bajo la piel; que representa, en general, el mayor % de grasa de nuestro organismo y cuya distribución depende, principalmente, de condicionantes genéticos y sexuales). Las áreas grasas más afectadas son las conocidas como “ZONAS REBELDES” que, ya de por sí (por sus propias características estructurales), son más ‘lentas’ a la hora de activar la lipólisis y que, aún más ralentizadas por un exceso de toxinas, se convierten en las más resistentes y difíciles de eliminar con dieta y ejercicio. Las zonas más habituales: abdómen y parte baja de la espalda en los hombres y muslos, contorno abdominal/cintura y caderas en las mujeres.

Pero hay más. Porque además de resistente y difícil de “quemar”, la grasa tóxica es eso: tóxica. Como ‘atesora’ encapsuladas en su interior todas las toxinas que captó cuando actuaba como protectora y, dado que para ‘eliminarse’ primero tiene que movilizarse (descomponerse para salir de la célula grasa al torrente sanguíneo), hay que ir con ‘cuidado’ a la hora de tratarla. Si sale mucha a la vez (adelgazamiento rápido o movilización descontrolada) y no se ayuda a su correcta evacuación (drenaje + detox) esas toxinas nos “atacan”, disparando la inflamación celular y derivando en envejecimiento prematuro, malestar (dolores de cabeza, fatiga, falta de energía…) e incluso enfermedades crónicas (metabólicas, etc).

Por qué decimos que puede afectar a todas las mujeres

Múltiples estudios demuestran que:

Hay personas delgadas con Síndrome de Grasa tóxica (conocidas popularmente como “FLAQUI-GORDAS”): Aunque de apariencia/estética externa pueden estar bien (al menos, delgadas), sufren alteraciones de las funciones orgánicas y ven afectado su bienestar. Los casos más típicos se dan en personas que tenía grasa tóxica en formato protector (atrapada en el interior de las células) y han perdido peso muy rápido y/o ‘descontroladamente’ por lo que el AA que estaba encapsulado en el adipocito ha pasado al torrente sanguíneo y les hacen tener bajas las defensas, estar permanentemente cansadas, etc.

– En el otro ‘bando’ están las personas con sobrepeso (incluso obesidad) pero sanas (popularmente llamadas “FOFI-SANAS” o “HEALTHY-CURVY”): su tejido graso mantiene ‘convenientemente’ aislado el AA y otras toxinas, así que si quieren ‘adelgazar’ o remodelar deben ir con ‘cuidado’ para que la ‘mejora’ estética no implique una mengua en su bienestar y salud.

Protocolo

Teniendo todos los anteriores elementos en consideración y tras 6 meses de protocolización e investigación, con base en los más punteros estudios y las principales teorías sobre el metabolismo celular y los cambios estructurales de las grasas (como las teorías neuroendocrina y del envejecimiento por inflamación celular o las últimas publicaciones del dr. barry sears sobre la grasa toxica…) y después de la realización de numerosos test y mediciones empíricas de eficacia/resultados, la especialista en estética antiaging y nutrición, Gema Cabañero ha protocolizado:

 

TOXIC-FAT FREE

(la Remodelación detoxificante-selectiva anti- grasa tóxica)

¿PARA QUIÉN? INDICACIONES:

El protocolo “TOXIC-FAT FREE” esta indicado para cualquier mujer sana, de cualquier talla y cualquier edad que presente grasa tóxica, ya sea de forma concentrada / ’encapsulada’ en forma de cúmulos de grasa localizada o rebelde (caderas, cintura, abdómen, múslos, parte superior de los brazos, zona central de la espalda o el conocido como ‘michelín del sujetador’, etc.) y/o bien ‘libre’/‘navegando’ las toxinas por el sistema sanguíneo, tras haber sido movilizadas sin control por un adelgazamiento rápido y o un programa/tratameinto remodelante podo adecuado.

 

CÓMO DETECTAR CON MÁXIMA PRECISIÓN SI HAY GRASA TÓXICA
<<DIAGNÓSTICO DUAL (INNER + GENETIC) WELLNESS>> ¡Nuevo!

Dado que en el desarrollo de la grasa tóxica hay un (muy) importante factor genético, el avanzado y exclusivo sistema diagnóstico INNER WELLNESS se amplia, incorporando a sus herramientas de medición un avanzado ESTUDIO GENÉTICO-METABÓLICO (“Genosaxe Fats”). El resultado es un nuevo (y mejorado) sistema de evaluación pre-tratamiento: el <<DIAGNÓTICO DUAL (INNER+GENETIC) WELLNESS>>, que consta de 2 partes, cada una de las cuales aporta distintos niveles de información relevante para abordar el correcto tratamiento de la grasa tóxica:

1) El DIAGNÓSTICO INNER WELLNESS, exclusivo de Gema Cabañero, proporciona datos objetivos acerca de proporciones y datos de composición de masa magra, masa hídrica y masa grasa así como porcentajes de cada tipo de grasa (incluída la tóxica y/o rebelde), a través de su Sistema de Medición Morfológica Segmental Octopolar (BODY FUNCTIONAL WORK STATION). Además, a través del SMFC (Scanner Morfo-Facial Computerizado) y de la Topografía Corneal permite medir los niveles de oxidación, glicación e inflamación silenciosa… y todos los parámetros del envejecimiento biológico relacionados con la formación de la grasa en general y la grasa tóxica en particular.

2) EL NUEV ESTUDIO GENOXAGE FATS, permite determinar parámetros tan relevantes como la predisposición genética individual a la metabolización de lípidos, la posibilidad de alteraciones en el ADN de las células grasas por factores hormonales, la tendencia a la acumulación de toxinas en la materia grasa/formación de grasa tóxica y la tendencia genética a los principales trastornos relacionados con la formación de grasa: retención de líquidos, falta de oxigenación del tejido adiposo, vasodilatación y alteraciones de la microcirculación, inflamación celular, glicación…

¿CÓMO ACABAR CON ELLA? TRATAMIENTO DE REMODELACIÓN
SELECTIVA PRO-DETOX <<TOXIC-FAT FREE>>

  • Frente 1) CLAVES DE LA REMODELACIÓN TECNOLÓGICA CON ONDAS ACÚSTICAS AWT® CELLACTOR:
  • Esta plataforma de body shaping no invasivo es pionera en aplicar al campo de la estética el tratamiento con ondas acústicas AWT® que, durante años, han venido siendo empleadas en Nefrología clínica, para la desintegración de los calculos renales. Numerosos test clínicos han demostrado que este tipo de ondas acústicas promueven efectos biológicos notables en materia estética-reductora: activando los procesos metabólicos de las células grasas y aumentando la elasticidad del tejido conjuntivo. De esta forma, la combinación de diferentes ondas acústicas ATW® de aplicación estética exclusivas de Cellactor, han confirmado una eficacia sin precedentes en el campo de la reducción de grasa subcutánea rebelde (con resultados de evolución medibles mediante ultrasonidos), con el plus de lograr mejorar, además, la elasticidad/tonicidad del tejido conjuntivo, minimizando al máximo los ‘descolgamientos’ habituales con la reducción de centímetros.
  • PASO -A -PASO:
  • – El protocolo con Cellactor, comienza con la aplicación del programa de ONDAS CORTAS O PLANARES, de alta energía que permiten acceder a un nivel en el tejido graso hasta ahora sólo posible mediante liposucción y logran ‘hacer diana’ eficazmente sobre las acumulaciones de grasa tóxica rebelde/asentada, reduciendo la toxicidad derivada su lipólisis, ya que no ‘rompen’ los adipocitos sino que permeabilizan la membrana de las células grasas haciendo que su contenido pase al torrente sanguíneo en una textura aceitosa que mantiene atrapadas las toxinas además de facilitar su posterior quema/eliminación.
  • – A continuación, se aplican pases de ONDAS RADIALES LARGAS, de baja energía (aunque son las que más se notan) que actúan a un nivel más superficial (cerca de la piel), tratando la elasticidad del tejido conjuntivo, contrarrestando la flacidez y alisando la piel de naranja/ celulitis por glicación.
  • – Para finalizar, un auténtico plus: el programa de IMPULSOS VIBRATORIOS ESTIMULANTES, muy agradables, en forma casi de masaje y que activan tanto las estructuras del tejido como el sistema linfático, ayudando a facilitar el transporte de las grasas y toxinas liberadas y contribuyendo, además, a la relajación de músculos.
  • Frente 2) DOBLE DRENAJE-DETOX (MANUAL + IÓNICO) CON MDL E HIDROLINFA: Es un binomio ganador para agilizar la expulsión de toxinas y grasas ‘descompuestas’ previamente mediante Cellactor:
  • – El MASAJE DE DRENAJE LINFÁTICO promueve la correcta movilización/transporte de las grasas y toxinas ‘liberadas’.
  • – La tecnología HIDROLINFA ayuda la expulsión de toxinas ¡a través de los pies! Gracias al campo electromagnético controlado generado por una resistencia que ioniza el agua dónde se sumergen, las toxinas son atraídas y se ve cómo son expulsadas (el agua cambia de color y textura según el tipo de toxinas) sin sentirse más que un cosquilleo.
About the author

Expertos