Las varices y el ciclismo, ¿hasta qué punto beneficia a la circulación sanguínea?
El ciclismo puede ayudar a aliviar las varices o a evitar su aparición siempre y cuando no se fuerce demasiado. Además, permite tonificar los músculos y quemar calorías, lo que nos ayudará a evitar el sobrepeso y, por tanto, el riesgo de aparición de venas varicosas disminuirá.
Realizar deporte es una de las formas de prevención de varices o de aliviar sus síntomas. Al no circular bien la sangre los músculos se ven limitados ante un esfuerzo físico porque la oxigenación no es la adecuada. Además los propios síntomas de las varices (edemas, dolor, hormigueos, sensación de pesadez…) pueden limitar el desempeño deportivo.
Entre los más recomendados para mejorar el retorno venoso encontramos la natación, el senderismo y el ciclismo, ya que no son deportes de gran impacto. Este último, en la especialidad de mountain bike, no está recomendado para personas con déficit respiratorio grave y/o problemas cardiovasculares pues pueden hacer que aumente la presión arterial bruscamente, sobre todo en competiciones.
El ciclismo puede ayudar a aliviar las varices o a evitar su aparición siempre y cuando no se fuerce demasiado. Además, permite tonificar los músculos y quemar calorías, lo que nos ayudará a evitar el sobrepeso y, por tanto, el riesgo de aparición de venas varicosas disminuirá.
El movimiento que se realizan con las piernas ayuda a mejorar el retorno sanguíneo. En caso de no poder realizar ciclismo puedes emular la bicicleta tumbado en el suelo ya que el mero movimiento circular y la postura favorecen a la circulación. Otros beneficios del ciclismo se deriva a las rodillas; la presión que soportan durante este movimiento cíclico nutre la articulación.
Los doctores Lisbona y Puncernau son cirujanos vasculares y recomiendan la bicicleta para mejorar el retorno venoso ya que los deportes que implican aeróbico ayudan a mejorar la circulación, al requerir un mayor trabajo cardiovascular.
Por el contrario, según los doctores, no es aconsejable realizar deportes como step, baloncesto o tenis. Como hemos mencionado anteriormente se tratan de deportes bruscos que golpean con fuerza el suelo y esto puede aumentar la sensación de pesadez en las piernas.