Cómo preparar tu propio plan de belleza para llegar a punto al verano
Con la subida de temperaturas y la llegada de días más largos, las escapadas a la playa los fines de semana y las jornadas de descanso en la piscina comienzan a ser más frecuentes. Es por esto que comienzan las preocupaciones e inseguridades propias de esta época. Sin embargo, encontrar la solución a todas ellas es más fácil de lo que crees.
Quizá aún no te hayas desprendido de ese par de kilos que cogiste en Semana Santa o notas que la ropa del pasado verano no te queda tan bien como antes. No te preocupes, aún estás a tiempo de ponerte ese conjunto ibicenco que tanto que te gusta y lucir palmito sin el más mínimo complejo.
Nada de dietas milagrosas que te hacen perder 3 kilos en la primera semana y engordar 5 en la segunda. Huye de la horrible sensación de hambre o de llenar tus estantes de cremas milagrosas que lo único que adelgazan es tu bolsillo.
Carmen Díaz, experta en belleza y directora del centro estético Germaine Goya, apuesta por un plan de belleza integral no solo para verano: “unos buenos hábitos de nutrición, ejercicio y tratamientos estéticos adaptados a cada necesidad deben darse la mano para acompañarte en un cambio de actitud que no te hará llegar a tiempo a la operación bikini, sino que permitirá adoptar un estilo de vida saludable y compatible con tu día a día”.
Para alcanzar el cuerpo que deseas y llegar al verano con tu talla soñada, lo primero que necesitas es contar con un buen profesional que te acompañe en este camino. De nada vale que te descargues una tabla de ejercicios, si no cuentas con una persona cualificada que te supervise y evite cualquier lesión posible.
De igual modo, con la comida no se juega.
Somos lo que comemos y comemos como sentimos. En los últimos años se ha demostrado la unión que existe entre las emociones y nuestra alimentación, por lo que es importante ser conscientes de nuestro estado ánimo a la hora de sentarte a la mesa.
Si de verdad quieres perder peso o quizá solo mantenerte en tu peso ideal, lo mejor es que acudas a un dietista nutricionista cualificado que estudie tu constitución física, tus necesidades nutricionales en base a tus características personales y, sobre todo, que sea esa persona titulada quien te guíe en el camino correcto hacia el peso deseado. Contar con un profesional a tu lado, hará que la báscula deje de ser tu enemiga.
Es el momento de que te plantes y pienses si realmente quieres un cambio. Si este año es el definitivo para que realmente adoptes un estilo de vida que te haga sentirte bien por dentro y por fuera, lo primero que debes hacer es cambiar tu mente.
En algunos casos, una buena alimentación y practicar ejercicio de forma habitual puede no ser suficiente para obtener el cuerpo que deseas. Es en estas situaciones cuando hay que tienes la opción de acudir a tratamientos estéticos específico.
Estrías, celulitis o piernas hinchadas son las principales preocupaciones de aquellas personas que se ven limitadas para conseguir su propia versión de cuerpo 10. Para acabar con ello, desde la cavitación al drenaje linfático, son muchos los tratamientos existentes que dan ese pequeño impulso, solo es necesario encontrar cuál es el óptimo para ti, y los resultados están más que garantizados.
Di adiós a las estrías
Has conseguido quitarte esos kilillos que te molestaban, has sudado la gota gorda para conseguir la firmeza en tus piernas que dabas por perdida pero en tu cuerpo permanecen la huellas de tanto esfuerzo: las estrías.
Los cambios bruscos de peso, como los que ocurren durante la pubertad o el embarazo, hace que muchos hombres y mujeres tengan pequeñas líneas blancas en determinadas partes del cuerpo, desde glúteos, a piernas, abdomen y brazos, cualquier lugar parece bueno para que aparezcan las estrías.
Acabar con ellas es difícil, pero no imposible. Para evitar su aparición, los expertos recomiendan hidratar la zona durante el embarazo o en la época en la que la pérdida de peso se hace evidente, pero si estas “pequeñas rayas de tigre” ya han aparecido, siempre podrás acudir a tratamientos que logran generar colágeno y elastina y así hacerlas desaparecer. Esto último es lo que consiguen herramientas como la radiofrecuencia corporal, donde a través de choques térmicos se consigue una evidente disminución de estas.
Olvídate de la celulitis
Si en tus nalgas sigue habiendo esa grasa que se resiste y ni las peores sentadillas acaban con ellas, quizá debas replantearte recurrir a la cavitación. Este más que emblemático tratamiento, consigue mejorar la actividad linfática de la zona tratada, facilitando así la eliminación de esa odiada piel de naranja.
Sin necesidad de cirugía, la ultracavitación consiste en un tratamiento no invasivo capaz de disolver la grasa más resistente y con resultados muy próximos a la liposucción. Entre cinco y ocho sesiones son suficientes para despedir de manera eficaz a esos hoyitos tan poco agraciados de tus glúteos, abdomen y piernas.
Acaba con las piernas hinchadas
La mala circulación que sufren muchas mujeres y hombres se hace más evidente con la subida de temperaturas, por ello cada vez más personas acuden a la presoterapia.
Esta técnica consiste en la activación de la circulación venosa de piernas, lo que favorece la circulación, evitando así la hinchazón de piernas tan frecuente en verano, al tiempo que consigue evitar la aparición de varices. Se recomienda acudir a este tratamiento entre 1 o 2 sesiones por semanas si se desea obtener resultados de forma más evidente y rápida.
Pequeños cambios de hábitos, cuidando tu alimentación y regalándote esos minutos para ti y tu cuerpo es todo lo que necesitas para conseguir el cuerpo que deseas.